Muchos estáis preparando las pruebas de acceso a grado superior de cara al año que viene. Hay alumnos que se presentan por primera vez, otros que quieren subir nota y otros que suspendieron en el pasado y quieren volverlo a intentar. Hay una serie de aspectos de la prueba que llevo observando en estos dos últimos años sobre los que me gustaría alertar. Vamos con ellos:
1- Siempre hay un examen con una dificultad mayor al resto. ¿por qué hacen esto? es muy sencillo. Ante la avalancha de exámenes a corregir, ponen uno muy difícil que corrigen en primer lugar con el objetivo de descartar a las personas que saquen menos de un 3 y ,con ello, se ahorran de corregir el resto de exámenes al no hacer nota media. Está muy claro, ¿verdad?
2- Los exámenes de junio son más importantes que los de septiembre porque en septiembre, como se suele decir, está todo el pescado vendido. De hecho, en septiembre suelen haber notas muy bajas, no superior al 6 de media. Con esto, os quiero decir que tenéis que ir a muerte por el de junio. No penséis que tenéis dos oportunidades porque no es así.
3- El número de alumnos matriculados ha aumentado drásticamente. La única condición para hacer el examen es ser mayor de 19 años, por lo que no hay ningún filtro que seleccione a los alumnos. Vais a competir con alumnos procedentes del bachillerato, personas adultas e incluso con auténticos profesionales del sector laboral.
4- Los alumnos que van con la parte común más la específica suelen suspender en un porcentaje bastante elevado comparado con los alumnos que sólo tienen la parte común. Es una gran desventaja ir con todas las asignaturas, por lo que muchos compiten en una tremenda desigualdad.
5. La nota media de los módulos ha subido bastante como consecuencia del aumento de la demanda, pero, por el contrario, ha aumentado el movimiento de las listas de espera de los módulos, es decir, es muy difícil entrar a la primera, pero luego hay más opciones de que te cojan en la repesca. Esto es así porque hay muchas circunstancias que llevan a un alumno a abandonar el curso en el primer mes.
6. Los alumnos que se preparan en buenas academias suelen sacar buenas notas. Con esto no quiero decir que lo tienen asegurado, pero sí que si son disciplinados y van a clase regularmente aprueban en más de un 90 por ciento de los casos. En nuestra academia, no sólo nos marcamos como objetivo que aprobéis, sino dotaros de herramientas teóricas y prácticas para salir adelante por medio de orientaciones de alto valor con las que la gente se desenvuelve en el ámbito laboral.
Sea como sea, que no te quepa duda de que si hay voluntad los conocimientos llegan y ,si no la hay, ya estás en manos de la suerte.
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